1. Limpie y limpie regularmente los casilleros.
Haz un poco de limpieza para mantener tu casa limpia y ordenada. Límpialo con un trapo húmedo y luego sécalo con un trapo seco para evitar los residuos de humedad, que pueden provocar fácilmente la corrosión y no son buenos para las cosas almacenadas. Después de limpiarlo, guarde los artículos que se colocaron originalmente allí.
2. Evite el contacto del casillero con gases y líquidos corrosivos para evitar la descomposición.
En general, hay tres tipos de hierro, madera y plástico. Para estos tres materiales, es tabú el contacto con objetos corrosivos, así que evite el contacto con gases y líquidos corrosivos. Además, evite los residuos de humedad, que pueden dañar fácilmente el casillero.
3. Evite rayar la superficie del casillero.
Para mantener el casillero y mantenerlo hermoso y brillante, en primer lugar, evite el contacto con objetos afilados. Al limpiar, es mejor usar un paño más suave para evitar rayarse durante el proceso de limpieza.